… “Aquí hay una fruta para que los cuervos agarren
Para que la lluvia recoja, para que el viento succione
Para que el sol pudra, para que el árbol se caiga
Aquí hay una cosecha extraña y amarga”.
Fragmento de «Fruta extraña» de Abel Meerepol; maestro, compositor y miembro del partido comunista estadounidense, escribió este poema en 1937. En 1939 fue interpretado por primera vez en la voz de Billy Holiday y es considerada la primera canción en contra del racismo.
Southern trees bear a strange fruit
Blood on the leaves and blood at the root
Black bodies swingin’ in the Southern breeze
Strange fruit hangin’ from the poplar trees
Pastoral scene of the gallant South
The bulgin’ eyes and the twisted mouth
Scent of magnolias sweet and fresh
Then the sudden smell of burnin’ flesh
Here is a fruit for the crows to pluck
For the rain to gather, for the wind to suck
For the sun to rot, for the tree to drop
Here is a strange and bitter crop
Debo trasladarme a final de la década del 50 en el Reino Unido, una tierra de contrastes étnicos y facetas culturales. Una década donde había empezado el movimiento urbano conocido como los mod. (Jóvenes que solían vestir de manera elegante, que generalmente se transportaban en motos de bajo cilindraje, scooter, y escuchaban ska debido a la influencia de jamaicanos inmigrantes que, junto al jazz, el blues y el rock and roll conformaban la música popular moderna de aquel entonces).
Ya en los 60s al otro lado del Atlántico la era hippie hacia historia con una filosofía de paz, drogas y amor, un mundo de libre pensamiento. La respuesta en UK fue dada en oposición por los llamados rude boy, un estilo también derivado de los inmigrantes jamaicanos con una postura más agresiva de clase obrera que desde luego escuchaban ska y reggae. La mezcla de los mod con los rude boy se convirtió en algo que llamaron hard mods, empezaba una mutación urbana que contraria a los hippies usaban el cabello corto, formaban peleas y usaban ropa de trabajo como tirantas y botas, pronto tomarían más identidad y se conocerían como skinheads.
En 1966 se celebró la copa mundial de fútbol en el Reino Unido, un fanatismo que despertó en los skinheads una ramificación conocida como hooligans, pero esa es otra historia.
Hasta ese momento no había una idea política o xenofobia como bandera de estas tribus urbanas, hay que resaltar que varios skinheads eran jamaicanos.
Poco tiempo después llega la invasión del punk, un sonido marginal con matices de odio a casi todo lo que rodea a la sociedad y entonces hay nuevos ingredientes. ¡En 1980 Garry Bushell bautiza como Oi! al estilo punk de Cockney Rejects, una agrupación de clase obrera proveniente de barrios de clase baja en Londres. El vocalista Stinky Turner adoptó ese grito en sus canciones típico de un lenguaje callejero que era simplemente otra forma de decir hola o hey!.
En este punto ya muchos pensamientos habían cambiado, ahora los ingleses se quejan por la falta de empleo y culpan a los inmigrantes de las colonias británicas, los partidos políticos toman parte creando el British movement y el National front, movimientos fascistas que llaman la atención juvenil especialmente agresiva y se empieza a fomentar un odio racial que a su vez daría el ingrediente final para una nueva versión de skinheads nacionalistas ahora conocidos como neo nazis.
Otras cintas recomendadas: Romper Stomper – Geoffrey Wright (1992), 16 years of alcohol – Richard Jobson (2003), This is England – Shane Meadows (2006), Combat Girls – David Wnendt (2012).
En 1976 se realizó por primera vez Rock Against Racism, un concierto que intentaba frenar algunos movimientos políticos supremasistas blancos en el Reino Unido presentando artistas como The Clash y Sham 69, una serie de conciertos anuales celebrados hasta 1981.
Poco tiempo después finalizando la década del 70 se celebró el Rock Against Communism, la otra cara de la moneda en el ámbito político en la Gran Bretaña, un concierto liderado por Ian Stuart de Skrewdriver banda inglesa reconocida por fomentar el movimiento neo nazi en UK.
Es poco común ver mujeres en estos grupos de neo nazis, algunas también llevan la cabeza rapada dejando un poco de flecos, otras que no son rubias naturales se pintan el pelo de tono rubio, usan botas, chaquetas tipo boomber, faldas cortas y ropa negra, aunque cabe aclarar que no es un uniforme, solo son algunos rasgos característicos de su imagen.
Actualmente en casi todo el mundo hay movimientos skinheads, algunos optaron por ser antifascistas y pretenden rescatar la verdadera identidad con la que nacieron hace medio siglo.
En países de la región de Latinoamérica existen neo nazis que aseguran ser arios y además racistas encasillados en esta ideología skinhead fascista, algunos de estos grupos son patrocinados por otros grupos paramilitares de extrema derecha que en ocasiones pertenecen a círculos de familias poderosas, apellidos con peso y tradición política. Se utiliza la misma herramienta como sucedió en Inglaterra, buscar excusas para odiar al inmigrante o a quien no es de su mismo color de piel porque creen que son inferiores.
“Siempre es legítimo desear elevarse por encima de uno mismo, nunca por encima de los demás”
Julia Ward Howe