KLAUS SCHULZE
Demiurgo musical.

Klaus Schulze nació el 4 de agosto de 1947 en Berlín Oriental y falleció el 26 de abril de 2022 en Alemania.

Hizo parte del movimiento musical conocido como Krautrock, más específicamente de la denominada Escuela de Berlín; una generación de músicos alemanes interesados en la exploración de nuevos sonidos generalmente producidos con aparatos e instrumentos electrónicos de teclado. La mayoría de sus obras fueron instrumentales, los resultados fueron muy variados pero en general se puede hablar de sonidos atmosféricos, psicodélicos, espaciales; que podrían llevar al oyente a estados de introspección, relajación, e incluso visualización si la persona se deja llevar por la imaginación.

Revisando la obra musical de esta generación podemos evidenciar las influencias que dieron a movimientos musicales contemporáneos y posteriores: el Rock Psicodélico, el Rock espacial, el Rock Progresivo, el Rock electrónico, la música ambiental, la música de la Nueva Era, la música electrónica, etc.

Una de las primeras apariciones de Schulze en el medio musical fue su participación en el álbum Debut de la aclamada banda de Krautrock: Tangerine Dream, el álbum se llamó Electronic Meditation y salió al mercado a principios de 1970. Curiosamente el papel de Schulze no fue en los teclados sino en la percusión, los teclados estaban a cargo del eterno líder de Tangerine Dream, el genial Edgar Froese.

La alineación completa para Electronic meditation fue:

Edgar Froese: teclados.

Conrad Schnitzler: Chelo, violín, efectos de sonido.

Klaus Schulze: batería, percusión.

Músicos invitados:

Jimmy Jackson: órgano.

Thomas Keyserling: flauta, experimentación sonora.

Schulze fue multinstrumentista, inició su formación musical con el estudio de la guitarra clásica, posteriormente aprendió a tocar el bajo, la batería y los teclados.

Se dio a conocer en el medio musical Berlinés como percusionista haciendo parte de grupos como Psy free, Tangerine Dream y Ash RaTemple. Más adelante se dedicó de lleno a la interpretación y experimentación con instrumentos electrónicos. Su estilo, aunque variado, dada su prolífica producción, se inscribe dentro de los rasgos característicos de la Escuela de Berlín; sonidos atmosféricos, espaciales, “psiconaúticos”…Sus obras iniciales son piezas musicales extensas que en su formato original en vinilo constaban de dos temas, uno por el lado A y otro por el lado B. Con la llegada del formato CD muchos de sus discos se reeditaron e incluyeron temas adicionales gracias a la capacidad del formato. Sus nuevas producciones en CD se hicieron de mayor duración. Schulze, a pesar de su formación académica, no escribió partituras de gran parte de sus obras, era un músico intuitivo con un altísimo grado de capacidad de improvisación, cuando empezaba a interpretar con los instrumentos que fueran había que prender la grabadora, todo lo que interpretaba era material disponible para una producción discográfica.

La obra de Klaus Schulze registra 54 álbumes a nombre propio entre grabaciones de estudio y en vivo; la capacidad creativa y la destreza instrumental de Schulze permitió que muchas presentaciones en vivo se llevaran al estudio de grabación aumentando enormemente su producción discográfica.

Realizó 7 álbumes en colaboración con músicos cercanos en un estilo musical más accesible publicados con el seudónimo de Richard Wahnfried.

Fue coautor de la serie Dark side of the Moog junto a Pete Namlook y ocasionalmente con Bill Laswell; esta es una colección de 11 grabaciones donde Schulze y sus compañeros crean obras a partir de la música de Pink Floyd, cada disco hace énfasis en uno o más temas de la banda inglesa.

Los sellos disqueros han publicado innumerables sencillos y recopilaciones de la extensa creación de Schulze.

Su obra también incluye una selecta lista de colaboraciones que se enumeran a continuación:

Tangerine Dream: Electronic Meditation, 1970.

Ash Ra Temple: 1. Ash Ra Temple, 1971.  2. Join Inn, 1973.  3. Friendship, 2000.  4. Gin Rosé at the Royal Festival Hall, 2000.

Walter Wegmuller: Tarot, 1973.

Sergius Golowin: Lord Krishna von Goloka, 1973.

The Cosmic Jockers: 1. The Cosmic Jokers, 1974.  2. Planeten Sit in, 1974. 3. Galactic Supermarket, 1974. 5. Sci Fi Party, 1974. 6. Gilles Zeitschiff, 1974.

Stomu Yamashita: 1. Go, 1976.  2. Go Live from Paris, 1976.  3. Go Too, 1977.

Rainer Bloss and Ernst Fuchs: Aphrica, 1984.

Rainer Bloss: Drive Inn, 1984.

Michael Shrieve and Kevin Shrieve: Transfer Station Blue, 1984.

Andreas Grosser: Babel, 1987.

Lisa Gerrard: Come Quietly, 2009.

Gunter Schickert: The Schulze / Schickert Session.

Hans Zimmer: Grains of sand (from The Dune Sketchbook), 2021.

The Cosmic Jokers no fue un grupo en el sentido estricto del término, fueron las grabaciones de varias sesiones de improvisación promovidas por Rolf Ulrich Kaiser, dueño del sello disquero Cosmic Curiers.

Las sesiones se realizaron en el estudio de Dieter Dierks; durante las reuniones los músicos consumían sustancias psicoactivas logrando momentos de improvisación inmemorables. Lo que los músicos no sabían era que Kaiser grababa las sesiones y después de un tiempo, junto a Dierks; las editaron, las prensaron y las sacaron al mercado, durante 1974, con el nombre de The Cosmic Jokers.

En estas sesiones participaron Klaus Schulze y Manuel Gottsching de Ash Ra Temple; Jurgen Dollase y Harald Grosskopf de Wallenstein  y el dueño del estudio, Dieter Dierks.

Cuando Schulze se enteró de lo ocurrido demandó a Kaiser.

La serie de trabajos con Stomu Yamashita, realizada entre 1976 y 1977 es un proyecto de Jazz Rock donde se conformó un Supergrupo en el que además de Yamashita y Schulze también colaboraron: Steve Winwood (Traffic), Michael Shrieve (Santana) y Al di Meola (Return to forever).

Retomando las palabras el propio Schulze..

”Lo importante no es la persona sino su legado”.

Lamentamos su partida y agradecemos al genial Klaus por su extensa y variada obra de la cual hemos tenido el privilegio de disfrutar y compartir con nuestros colegas de afición. Él y sus contemporáneos abrieron los caminos para posteriores generaciones de músicos interesados en la exploración de nuevos sonidos.

Edgar Villarraga

Amante del rock progresivo