Han pasado más de tres décadas desde que THERION dio inicios a algo que se llamaría “Metal Sinfónico” y que quedaría grabado en la mente, en el gusto y en el sentir de muchos seguidores de este género alrededor del mundo; despertando hacia una música ingeniosa, novedosa, grandilocuente, inteligente, mística, orquestal y vibrante.
Sin duda los adjetivos se quedan cortos para lo que representa esta banda y su música, pero aún más cuando se quiere describir la experiencia de verlos en vivo. Fueron muchos años para mi esperando esta oportunidad, parecía irreal el estar allí, se convertía en una ocasión única, no osaría de nuevo perderle. Por ende, había que estar temprano y prepararse para este gran momento, elegante y en disposición para tan solemne espectáculo como lo pude ver en muchos de los asistentes, especialmente en las chicas.
HEREJIA es la banda local elegida para ser el preámbulo de tan magnifica noche. En su puesta en escena demuestran su profesionalismo, su experiencia y trayectoria con un sonido impecable, buenas canciones, las imágenes y videos en la pantalla y la interlocución con el público hace que disfrutemos de un buen show, no en vano son una banda icono del Metal hecho en Colombia.
Llega la hora de THERION y con un intro orquestal van saliendo al escenario uno a uno los miembros de la banda, palpita el corazón, la piel se eriza, el recinto estalla en gritos de emoción en su totalidad. Siguen una breve parte de la magnífica pieza de Carl Off, “O fortuna” con estas sublimes notas de esta melodía elevan los sentidos desatando una euforia colectiva. Enseguida “The Blood of Kingu” abre en este momento en que ya todo parecía envuelto en un halo onírico porque además de preciar tan excelente música, la puesta en escena era excepcional, el vestuario, el carisma, las voces, la totalidad. Con “Birth of Venus Illegitima” fue retroceder en el tiempo y recordar la primera vez que se escuchó esta canción, el vídeo con Martina, momentos que hacían sentir nostalgia y alegría a la vez solo por el hecho de haber vivido tanto a través de la música. Llega “Litany of the Fallen”, una canción más reciente, del Leviathan II, sin duda, THERION no pierde su esencia y este álbum es una joya más dentro de su discografía. Sigue “Tuonela”, otra canción llena del misticismo, del Leviathan I, llena el escenario con majestuosas voces. Con
“Ginnungagap” el éxtasis iba in crescendo, este tema nos habla del gran y frío vacío del abismo entre el Niflheim y Muspelheim, justamente del álbum “Secrets of the runes” un álbum temático que aborda este fascinante mundo de la mitología nórdica.
Llega un momento electrizante donde la piel se erizaba y ese presente se hacía sublime con la canción “Lemuria”, homónimo del mismo álbum, del cual se continuó con “Abraxas” y “An Arrow From the Sun” tres canciones del mismo álbum en las que se desplegaba todo el virtuosismo y grandeza de esta banda, para lo cual no hay suficientes palabras. La noche continua con “Wine of Aluqah”, recordando ese hermoso álbum que fue el “Vovin”, uno de mis favoritos. Seguimos en la remembranza con “Cults of the Shadow” del “Theli”, mi álbum preferido de la banda. Dos canciones que elevaron aun más la temperatura y que el público coreaba con fervor. Un éxtasis total se vivía en el recinto y la magia parecía circular por doquier, la música, las voces, la energía, todo parecía elevarse sustancial e indeteniblemente.
Suena “Leviathan” homónimo del mismo álbum, “Asgård” del “Secrets of the runes” nuevamente, todo un temazo. Sigue “Pazuzu” y “Codex Gigas” del “Leviathan II”, para este momento era indiscutible que este concierto superaba cualquier expectativa, la belleza de las voces de las vocalistas Rosalia Sairem y Chiara Malvestiti, lo reafirmaban. Viene un tema para mi muy especial “Son of the Staves of Time” dada mi fascinación por las runas y por ese álbum mágico “Gothic Kabbalah”.
Para cerrar con broche de oro no podían faltar dos icónicos temas “The Rise of Sodom and Gomorrah” del “Vovin” y «To Mega Therion” del “Theli”, éxtasis total, indescriptible, vibrante y pomposo cierre. Sin embargo, hubo una canción más en este setlist “Quetzalcoatl” del “Lemuria” un tema con el plus de tener apartes en español y darle un cierre mágico a la noche. Una noche de esas que no se olvidan, un concierto sublime, simplemente. Fue un privilegio ver esta banda en escena, sentir más allá de los sentidos su música, reconocer con sus poderosas letras la evocación de un mundo místico y oculto de antiguas culturas y magia; sumado esto a sus majestuosas armonías nos envolvieron a cada uno de nosotros en esta noche para hacernos sentir que será una de las bandas que nunca se olvidarán y que sigue vigente.
