Sin duda el nombre a este evento le queda muy bien, grandes del Rock fueron los que pudimos apreciar en vivo en esa inolvidable noche del 30 de abril en Bogotá. Un concierto que tuvo mucha emoción, alegría y un extraordinario repertorio musical. Pero antes de ello, hay que hablar un poco del lugar del evento, el Coliseo MedPlus, si bien está muy bien distribuido y tiene una excelente acústica, llegar e irse de allí es una horrorosa prueba a la paciencia, debido a la congestión vehicular, la dificultad del transporte y el difícil acceso a este lugar; también algo a mejorar es la salida dentro del recinto una vez termina el show, en caso de emergencia sería una trampa mortal, pues no hay muchas salidas disponibles, al menos yo no las vi; otra queja de muchos fueron los precios de alimentos y bebidas, por momentos me hicieron sentir en un aeropuerto, todo muy costoso. Bueno, son solo algunas observaciones del lugar.
Ahora sí, hablemos de lo que nos quedó en la memoria de este fabuloso concierto. Por esas mismas razones del difícil acceso al lugar, los trancones, y los temas de movilidad en Bogotá, no alcancé a ver a DARKNESS (me hubiera gustado verles, y recordar esos años vividos en Soacha cantando “Metalero”, entre otras). Sin embargo, sí pude ver el show de KRONOS, que orgullosamente cumplen 40 años en los escenarios, y sin duda son legendarios representantes del Rock nacional.
Los horarios se cumplieron sin mucho retraso y era el turno de OPETH, para mí, una banda de mi más profunda admiración y gusto, debido a su increíble creación musical, difícil de digerir para la mayoría del público asistente; pero en sí, un show hipnótico, mágico y cargado de poderosas melodías y elementos musicales magistrales. En su setlist escuchamos: §1, Master’s Apprentices, The Leper Affinity, §7, In My Time of Need, §3, Ghost of Perdition, Sorceress, Deliverance. Con estas canciones, las luces, y las intervenciones de “Miguelito” o Mikael Åkerfeldt, pudimos vivir con OPETH una atmosfera diferente y especial que hace que sus presentaciones puedan ser calificadas de espléndidas e impecables.
Continuando con el show llegaría la hora de EUROPE, personalmente la banda más esperada, pues nunca les había visto. EUROPE se robó el show en la noche, pues la entrega, el carisma y la voz de JOEY TEMPEST hicieron que el coliseo se desbordara de alegría, magia, risas y coros desde el inicio hasta su cierre con la icónica canción “The final countdown”. Puedo decir que me sorprendió gratamente EUROPE, no solo por lo mencionado sino porque JOEY TEMPEST usó esas expresiones tan locales como: “Que chimba” y “Chao parceros”; por su interacción con el público, sus recordadas “maromas” con el micrófono y el hacer corear al publico canciones como “Breaking the law” y “No woman, no cry”, sin olvidar los teclados de esta banda y los increíbles músicos que le acompañan. Esos pequeños detalles hicieron del show algo sorprendente e inolvidable, aun sin hablar del exquisito setlist de canciones: On Broken Wings, Rock the Night, Walk the Earth, Scream of Anger, Sign of the Times, Hold Your Head Up, Carrie, War of Kings, Stormwind, Open Your Heart, More Than Meets the Eye, Last Look at Eden, Ready or Not, Superstitious, Cherokee, The Final Countdown. Ese repertorio tuvo todas estas joyas, pero sobresalieron canciones como “Carrie” que hizo cantar al público con el corazón, “Walk the Earth” que es una canción hermosa y profunda, la fiesta fue con “Rock the night”, “Surperstitious” y “Cherokee”, y obviamente el cierre con “The final countdown” era lo esperado y el más ovacionado. Sin duda EUROPE tuvo un show increíble, inolvidable y superó cualquier expectativa.
Para cerrar llega la legendaria, icónica y magistral banda JUDAS PRIEST con un show que jamás dejará de ser uno de los mejores del Heavy Metal. Es admirable como ROB HALFORD con su más de 70 años de edad y pese a que le pegó la altura de Bogotá dio todo de si para brindar un show de calidad y memorable. Los 50 años que lleva la banda en el escenario los consolidan como una de las mejores bandas de Heavy Metal y no queda duda cada vez que les podemos ver en vivo. Así sonaron 21 grandes canciones, cada una con imágenes especiales en la pantalla de fondo y haciendo vibrar los corazones de los asistentes, las 21 magistrales piezas fueron: “Panic Attack, You’ve Got Another Thing Comin’, Rapid Fire, Breaking the Law, Riding on the Wind, Love Bites, Devil’s Child, Saints in Hell, Crown of Horns, Sinner, Turbo Lover, Invincible Shield, Victim of Changes, The Green Manalishi, Painkiller, The Helion, Electric Eye, Metal Gods, Heading Out to the Highway, Diamonds & Rust, Hell Bent for Leather, Living After Midnight”. Para los que amamos las motos y el Rock and Roll la canción “Hell bent for leather” y ver esa super bella máquina, una Harley Davidson, le imprimió más magia al show que ya estaba por terminar. Finalmente, tuvimos un cierre que se convirtió en una fiesta con “Living after midnigth”, un himno que nos deja saber que amamos la mejor música de este planeta, el Heavy Metal.
Finalmente, puedo decir que este MONSTERS OF ROCK fue memorable, aunque fue una pena no ver a SCORPIONS, que debido a los problemas de salud de Klaus Meine, hubiera sido aún más espectacular este grandioso concierto, aunque esto permitió que EUROPE y JUDAS PRIEST alargaran su setlist de canciones. Sin duda, el que vive es el que lo disfruta, lo siente y puede decir mucho más de lo aquí expresado. Esperamos poder seguir viendo a estos monstruos del rock por más años. Keep in rock!
